Todo empezó hace diez años cuando los D2 atacaron Boston. En el incidente, conocido como la Tragedia de Boston, perdió la vida un director de orquesta llamado Kenji Asahina, el padre de Takt. Tras perder a su padre, Takt decide dedicarse a tocar el piano, dejando que la rabia fluya a través de las melodías. Quien lo cuidó fue una niña llamada Cosette, que se parecía a Destiny.

De camino a Nueva York, Takt y Destiny reciben lecciones especiales de combate de Lenny y Titan. Sin embargo, Takt y Destiny todavía tienen dificultades para sincronizarse. Después, se encuentran con un viejo amigo de Lenny, Jonathan, quien los lleva a la finca donde trabaja, cerca de Las Vegas.

Takt y sus amigos por fin llegan a Nueva Orleans y se encuentran con una ciudad apagada y envejecida debido a la situación actual. Anna y Destiny creen que allí podrán aprovisionarse, pero los residentes les piden ayuda. Mientras tanto, Takt vaga por la ciudad solo y escucha una melodía que resuena silenciosamente en un viejo bar. Definitivamente es el sonido de la música.

Una siderita de la noche negra enorme comienza a crecer cuando Sagan toca una melodía, amenazando con tragarse la Symphonica. Mientras Takt y Destiny son testigos de este espeluznante espectáculo, descubren que Anna y Charlotte todavía están dentro de la Symphonica.