Akebi debe decidir a qué club ingresar, pero le cuesta elegir con tantas opciones disponibles. Mientras tanto va forjando vínculos con sus compañeras, ya sea halagando sus piernas o bajo la lluvia.

Cuando Kei pide a Akebi que sea su modelo para unas sesiones fotográficas, Akebi no sabe si será la apropiada, pero está dispuesta a ayudar a su amiga, en especial tras las fotos que le envió la última vez.

Una chica observa desde la distancia a Akebi. ¿Qué quiere de ella? Nuestra protagonista no tardará en descubrirlo.

Akebi quiere invitar a Erika a su casa, pero aunque cuando tiene la idea rebosa confianza, luego le cuesta decírselo y Erika comienza a sentir que Akebi quiere decirle algo.

Se acerca el festival deportivo y Akebi ha decidido convertirse en animadora, pero su energía, como siempre, sorprende a sus amigas y compañeras.

Akebi está practicando para el festival deportivo y ella y sus amigas querrían practicar el fin de semana en un gimnasio, así que llama a su antigua profesora para pedirle ayuda.

En el festival, Akebi recibe todo el apoyo de sus compañeras, quienes recuerdan con cariño todo lo que la joven ha hecho por ellas desde su llegada.