Cuando un olor delicioso despierta a Marcille, Senshi le explica cómo llevar una dieta equilibrada. El grupo ayuda a un aventurero envenenado por un basilisco.

Mientras que otro grupo de aventureros descubre un ‘tesoro’, Laios y compañía huyen de una horda de fantasmas escalofriantes. Por suerte, Senshi tiene un plan muy goloso.

Marcille recuerda cómo conoció a Falin cuando eran estudiantes. Después, se ve con el agua al cuello cuando un descuido la mete en problemas con un espíritu furioso.

El equipo se enfrenta finalmente al dragón rojo, pero su gran estrategia se desmorona rápidamente, desatando la furia de la bestia... ¿Quién recibirá el mordisco final?

En un nivel superior de la mazmorra, Kabru y compañía despiertan y descubren que sus suministros han desaparecido. De camino a la superficie, caen en una emboscada.

Los grupos de aventureros se alían para repeler el ataque de unas feroces arpías, pero la sorprendente aparición de una Falin transformada los deja a todos alucinados.

Izutsumi demuestra que es una aliada útil a pesar de sus terribles modales en la mesa y su aversión a comer monstruos. Además, la amabilidad del grupo consigue que cambie.

De vuelta en el campamento, Senshi relata su dolorosa relación con la mazmorra. Al día siguiente, el grupo se despierta abruptamente, víctimas de una sorprendente transformación.