Un día, al regresar de la escuela, Ohana Matsumae se entera de que su madre se va de viaje a la luz de la luna con su novio para escapar de las deudas y la envían a vivir en la posada de aguas termales de su abuela separada en el campo. Cuando su mejor amigo, Kōichi Tanemura, se entera de esto, confiesa su amor por Ohana antes de salir corriendo, sin despedirla cuando se va.

Los miembros del personal de Kissuisō esperan e intentan prepararse mentalmente para la llegada de Satsuki. Sui pone a Nako a cargo de cuidar a Satsuki, mientras que los demás especulan sobre si es una buena idea o no. Al llegar, Satsuki comenta que la posada no ha cambiado en absoluto desde sus años de niña y critica constantemente cómo se hace todo.

La posada se preocupa por la escasez de personal, pero rechaza la oferta de Ohana de ayudar. Sin embargo, siente que necesita hacer algo y, después de que la posada no puede encontrar camareras de reemplazo, aceptan la ayuda de Ohana, y Minko y Nako deciden ayudarla también.

Es el día anterior al festival escolar, por lo que Minko se despierta temprano, compra los ingredientes y comienza a prepararse con la ayuda no deseada de Ohana. Cuando Nako pide arroz con tortilla para el almuerzo, Minko, imperturbable, hace un plato de arroz con tortilla perfecto.

Con el creciente número de reservas, Ohana se preocupa por los cambios que está haciendo Kissuiso y la falta de sueño de los empleados. También se encuentra en desacuerdo con algunos de los demás por ponerse del lado de Sui.

Mientras todos exploran el festival Bonbori, Ohana, que ahora sueña con ser como Sui, se encuentra con Kō y finalmente le confiesa sus sentimientos. Después del festival, se lleva a cabo una fiesta de despedida para Denryoku, donde Enishi anuncia que acepta que se cierre el Kissuiso hasta que sienta que tiene el talento suficiente para administrarlo correctamente.