Siete anda muy justo de dinero y, tras hacer un curso intensivo para ser un asesino, abre una peluquería de tapadera. Su primer encargo es contarle el pelo a una novia.

Miau, la jefa de los gatos, contrata a Siete para que liquide a un viejo amor. Pero, al descubrir una triste historia de amor entre especies, intenta que reine la paz.

El combate de Seven y Thirteen es de tijeras contra espada. Seven no puede con su diestra adversaria y decide transformarse en la mitad de un durián.

La Island Purity Society convoca a Seven para que mate a un coleccionista de ropa interior, pero Seven anima a todos a aceptar sus diferencias.

Seven se transforma en una caja de cartón y lucha contra una colérica y estafadora vendedora de frutas a cuyo nieto Seven le hizo un feo corte de pelo.

Cola, el próximo objetivo de Seven, solicita su ayuda para marcar una lista de hechos traviesos, pero el cliente que contrató a Seven tiene un secreto.

En nombre de la guardia costera con fondos insuficientes, Seven acepta matar al capitán de un submarino que amenaza la isla.

Siete, contratada por una mujer para asesinar a su marido, se enfrenta, y se une, al impenetrable guardaespaldas He Dachun, que hace un sacrificio desgarrador.

Siete se une a los isleños para evitar que el Príncipe de Stan extraiga una roca energética y destruya la isla, pero la tecnología de Stan es demasiado robusta.

Trece acude en ayuda de Seven en un acalorado enfrentamiento con el Príncipe de Stan. Seven recuerda su pasado como figura prominente de Xuanwu.