Happiness (1998)

Rédigée par Isi Jiménez Cortés le 26 octobre 2020

Puede que estemos ante la comedia mas terrorífica que veremos en la vida. Se traspasan líneas de forma tan abrumadora que la desdicha dibujará sonrisas y los bajones culpabilidad.

El entramado de personajes huye de la vida para poder sentir. Es la depresión colectiva. Es el malestar de una sociedad triste. Es el sitio inadecuado en el que sus raíces han agarrado. Es la mentira que durante años nos han inculcado y obligado a vivir.

Tan triste que parece cómico. Como esas conversaciones con el padre sobre la masturbación, que te va sacando sonrisas durante el metraje hasta llegar a esa última conversación en el sofá.

El surrealismo en la relación de la chica insegura con el taxista ruso o la esposa con sobredosis de felicidad con una familia a contracorriente, son caricaturas de éste mundo que no permite que le prestes demasiada atención si no quieres acabar quitándote la vida. Es tan "heavy" que hasta el psicólogo de turno está en terapia.

No es mejor la soledad que la vida en pareja al igual que no es lo mismo el trauma por ser violado que los deseos de estar traumatizado por contar al mundo tu fidelidad.

La película de Todd Solondz funciona tan bien porque todo es tan estúpido como regalar un cenicero a quién no fuma. Su reparto es exquisito. Su estética de video y la gama de colores que utiliza la hacen muy de su época.

Ríete de la vida. Disfrútala y se honesto contigo mismo.