En la primera entrega de la entrega, después de superar el inquisitivo examen del capitán, Beckett se sorprende cuando le ofrecen un ascenso al puesto de capitana de policía. Castle y la agente tratan de amoldar su vida personal a los nuevos condicionantes del cambio profesional de la detective cuando la misteriosa llamada de un extraño desencadena una peligrosa serie de acontecimientos. Cada historia siempre tiene dos caras y en esta ocasión se abordará tanto desde la perspectiva del famoso novelista como desde el punto de vista de su sagaz mujer.

Tras recibir un misterioso consejo del pasado, Beckett lucha por su vida mientras un grupo de mercenarios le pisa los talones. Mientras Castle investiga las razones por la que su esposa se ha fugado, Kate trata de descubrir quién ha ordenado su muerte antes de que sus perseguidores culminen su trabajo.

Castle se infiltra en la universidad para poder resolver el asesinato del líder de una fraternidad. Su objetivo será hacerse pasar por un profesor invitado en el campus para acercarse a los círculos de la víctima y aportar más pruebas para poder ayudar a Beckett.

Tras descubrir que el mejor novelista de los últimos tiempos ha sido asesinado de una forma misteriosa, Castle se siente afligido. Encontrar al responsable de los hechos será la forma en la que Richard rinda culto a su ídolo asesinado mientras rezaba en una iglesia.

Un conductor que transportaba una obra de arte de incalculable valor aparece asesinado y no hay rastro del cuadro. Castle y Beckett interrogan al principal testigo del suceso para encontrar el valioso objeto y descubrir la identidad del asesino.

Ethan investiga el caso de un robo y pide ayuda de nuevo a Castle para resolverlo. La investigación da un giro cuando se encuentra un cuerpo relacionado con el crimen y Slaughter pasa a convertirse inesperadamente en el principal sospechoso.

Con el fin de cazar al brutal asesino de un estafador, el dúo formado por Castle y Beckett debe ponerse manos a la obra para investigar a la élite de Nueva York. Mientras tanto, el escritor ha ideado un plan para sorprender a Beckett en su primer aniversario de boda.

Castle y Beckett investigan el asesinato de uno de los animadores de un crucero. A medida que avanzan en sus pesquisas, se ven atrapados en alta mar con el asesino.

Un cuerpo sin vida aparece en el último espectáculo teatral de Martha, por lo que Castle y Beckett se ven obligados a investigar en el mundo de las competiciones musicales a capella.

Castle afronta el día en el que debe acudir a un juicio como testigo de un asesinato que ocurrió unos meses atrás. Sin embargo, sale nueva información sobre el caso que obliga a Becket y al novelista a trabajar sin descanso para evitar que se produzca un error judicial.

Cuando el hijo de un diplomático ruso es asesinado, Castle y Beckett se ven inmersos en una nueva versión de "Crimen y castigo". Durante la investigación, el novelista se verá obligado a tener como invitado a un joven agente ruso, que parece más involucrado en el caso de lo que ambos detectives creían.

Castle y Beckett son secuestrados y obligados a participar en un macabro juego junto a un grupo de extraños. Mientras tratan de resolver los perversos rompecabezas mentales, Alexis y el equipo de la policía del distrito 12 emprenden una carrera contrarreloj para rescatar a sus amigos y descubrir al peligroso asesino.

Beckett trata de esclarecer el asesinato de un estudiante. La investigación del caso se complica cuando los compañeros de clase de la víctima se niegan a hablar con la policía, por lo que Castle se ve obligado a infiltrarse en el centro académico.

Castle viaja a Los Ángeles en busca de respuestas sobre el periodo en el que estuvo desaparecido. Sin embargo, su plan da un giro inesperado cuando la legendaria Sociedad de Detectives, liderada por Mason Wood, le pide ayuda para lograr resolver un crimen.

Kate y su equipo se desplazan hasta la Academia de Policía de Nueva York para resolver la investigación de una recluta asesinada. Por otro lado, Castle se encuentra en una encrucijada y debe tomar una decisión que tiene muchas implicaciones para sí mismo y para Beckett.

Castle y Beckett investigan la muerte del conductor de un furgón blindado y encuentran una pista que les lleva hasta una antigua investigación de Esposito. El caso se complica al descubrir que el inspector podría no estar diciendo toda la verdad sobre la sospechosa.

Castle y Beckett investigan un asesinato que podría estar relacionado con el contrabando de antigüedades. Esta conexión pone en alerta a toda la comisaría, que busca sin descanso una reliquia robada que podría llevarles directamente al asesino.

Tras hacer un favor a un viejo amigo, Hayley se encuentra implicada en un ataque informático. Debido a esta situación, Castle y Beckett se apresuran para limpiar rápidamente el nombre de Hayley en la red.

Cuando un afable inspector de riesgos sobrevive milagrosamente a un envenenamiento, todo el mundo cree que es cuestión de suerte. Sin embargo, se desata un misterio cuando el trabajador sobrevive a otra intoxicación. Castle y Beckett se hacen cargo del caso.

Un hombre con un hacha se escapa del psiquiátrico y aparece muerto en las oficinas de Castle. Tras este suceso, Beckett y el escritor investigan el caso y sospechan que podría ser obra del anticristo.

La pareja arriesgará su vida en este último episodio para dar caza a LokStat, nombre en clave de un implacable jefe de la droga y líder de una red de blanqueo de dinero.