Angeline fue abandonada de pequeña y ha crecido bajo la tutela de Belgrieve, su padre adoptivo. Tras marcharse unos años a la ciudad para convertirse en una aventurera de rango S, ha pedido unas vacaciones para volver a ver su padre, aunque la cantidad de trabajo que tiene le dificulta que pueda regresar.

Belgrieve, el padre de Angeline, recibe la visita de la familia Bordeaux para agradecer lo que hizo su hija recientemente. Dada su fama con la espada, sus visitantes no dudan en ponerlo a prueba.

En el gremio de Orphen descubren, al fin, la causa del brote de monstruos. En cuanto acabe con ellos, Angeline será libre para tomarse unas vacaciones y volver a casa.

Angeline y sus compañeras llegan a Turnera dispuestas a descansar y a disfrutar de unos días de paz y tranquilidad, pero Belgrieve no puede evitar provocar alguna que otra discusión con su hija.

El jefe de Turnera pide a Belgrieve que entregue una carta a la familia Bordeaux. Angeline ve en esta ocasión la oportunidad perfecta para emprender un viaje con su padre, pero lo que ninguno espera es la trama que les espera al llegar a la ciudad.

Mientras Ange y su grupo se alojan en la mansión de la familia Bordeaux, unas nubes extrañas envuelven la ciudad y dan lugar a unos monstruos tan poderosos como para plantar cara a aventureros de rango S.

En Turnera aparece un habitante del bosque con una misión. Mientras tanto, en Orphen, Angeline se propone buscar esposa para su padre.

Mientras Ange lidia con Byaku y Char, Belgrieve conoce más en profundidad a los elfos que visitan la aldea y el motivo por el que están allí.

Ange toma la decisión de ayudar a Char y Byaku, pero los chicos no son bien recibidos allá por donde pasan. Además, los monstruos y los enemigos no dejan de aparecer y atacar.

Se acerca el invierno y es hora de decidir qué hacer durante los próximos meses. Belgrieve se siente atormentado por su pasado y deberá decidir si quiere enfrentarse a él.

Belgrieve llega a Orphen decidido a investigar sobre sus antiguos compañeros de grupo, pero, después de tanto tiempo, cuesta mucho encontrar a gente que sepa algo de ellos.

Ange recibe su homenaje en Estogal mientras planea en volver a casa y reencontrarse con su padre, aunque el camino de vuelta no parece fácil.